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GR 11: Parzán - Biadós

Anterior: Pineta - Parzán

Esta etapa empieza igual que terminó la anterior, pero al reves: un primer tramo de carretera hasta el puente sobre el río Barrosa, afluente del Cinca, y una interminable pista, ahora de subida, por el barranco de Urdizeto hasta casi el collado del mismo nombre. Al cambiar de vertiente empiezan las vistas al Posets; ahí el GR desciende hacia el valle de Chistau, donde se encuentra el refugio de Biadós, final de la etapa

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Según la guía Prames que tengo desde hace 10 años, el GR 11 sale de Parzán siguiendo la carretera A-139 en dirección al Túnel de Bielsa, durante 1,3 km., hasta encontrar el desvío de la pista. Pero por lo que descubrí in situ, las marcas blancas y rojas van por un sendero que, saliendo de la carretera a Chisagúés -la misma que el día anterior se me hizo eterna de bajada-, sigue una conducción de agua hasta muy cerca del puente. O lo que es lo mismo, me tuve que tragar un km. de asfalto teniendo al lado una alternativa que no conocía; tendré que actualizar mis fuentes de información...

La carretera va siguiendo el río Barrosa; antes de llegar al puente ya se adivina el barranco a la derecha, coronado por la Punta Suelsa

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Al cabo de 1,3 km llego al puente y me encuentro con las marcas de GR, que ha venido por al camino superior y desembocan unos metros más adelante. Dejo la carretera y cruzo el Barrosa; más allá sólo hay el antiguo Hospital de Parzán, poco antes del túnel fronterizo

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Parzán queda abajo, en el valle del Barrosa, bajo la Sierra Espierba; abajo a la derecha se ve el camino que sigue el GR

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Y aquí empiezan 8 km. de pista todo para arriba; muy bonitos, pero se hacen pesados; además, durante todo el ascenso hubo movimiento de vehículos de una compañía eléctrica que suben y bajan de las presas. El primer tramo por un espeso bosque

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Luego al acercarse a unas bordas se van abriendo los prados; al fondo se alza el fronterizo pico de la Espada

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El día se ha levantado algo peor que los anteriores y ya veo que las cimas quedan algo tapadas, pero no van a ser las nubes que me traigan problemas; más bien el viento, que se va a hacer muy incómodo durante prácticamente toda la jornada (y más aún en la subida)

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La pista no deja de subir, hacia atrás sobresalen ya la Sierra de Espierba en primer término y la de las Tucas detrás, con dos de las tres Marías a la derecha

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Mientras, por delante me voy acercando al embalse y la central eléctrica de Urdizeto

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Poco antes de alcanzar la presa, el GR deja la pista, que gira a la izquierda, y sube rápidamente por un sendero; delante sube también el vial de acceso a los edificios de la hidroeléctrica, que cruza después el río y que no hay que seguir

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En corto pero fuerte ascenso, el sendero alcanza pronto el embalse de Urdizeto (1.960 m)

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A partir de aquí se acaba el entorno boscoso y el viento empezará a tocarme las narices más de lo deseado. En seguida vuelvo a la pista y aprovecho esta pequeña cabaña para comer algo y abrigarme. La tenía en la lista de sitios donde poder pasar una noche pero visto su mal estado, no la recomiendo; pasado el collado hay otra mejor

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Continúo pista arriba, todavía durante algo más de un km., ya empiezo a tener ganas de cambiar de terreno, por bien que el valle me está gustando. Por encima, esas peñas rodean el lago "grande" de Urdizeto, desde el que se accede tanto a Punta Suelsa como a Punta Fuesa

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Mientras tanto el lago "pequeño" va quedando atrás...

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Al fin adivino la posición del collado, aunque me queda todavía un rato. El barranco se encara ahora hacia el sur...

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...y cuando la pista gira a la izquierda, nace un sendero que evita las últimas curvas

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El camino sube también zigzagueando, y poco antes del collado se desvía un enlace transfronterizo al Puerto de Urdizeto. El barranco del mismo nombre ya toca a su fin, coronado por el Pico de la Espada



Por fin alcanzo el Collado de Urdizeto (2.315 m.), en cuatro horas y media desde Parzán, a ritmo muy tranquilo e incluyendo paradas; en tres horas y media se puede hacer sobradamente. No me entretengo mucho rato ya que me falta poco para salir volando, el viento se hace aterrador; lo justo para echarle la foto de rigor a la Punta Suelsa...

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...y al paisaje que va a acaparar mi atención durante la segunda parte de la etapa: el barranco de Sallena y, sobre todo, el macizo de Posets o Llardana

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El GR gira ahora por un sendero a la derecha; a 200 m. se encuentra el refugio libre de Urdizeto, en bastante mejor estado que el anterior. Continúo por sendero, sin perder casi altura desde el collado, que ya queda atrás, y por lo que parece cada vez más tapado

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En vez de bajar directamente por el Barranco de Sallena, el GR llanea hasta encontrar la cabecera del Montarruegos, tributario del anterior, bajo el Puerto de Plan, la Peña Blanca y la Tuca Montarruego



Esta cabecera tiene un relieve muy suave, prácticamente llano, con anchos pastos y pocos árboles... Si no fuera por el viento, que sigue molestando (pero menos que en Urdizeto), sería un lugar ideal para echar una siestecita

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Una vez aquí el descenso se hace más acusado, siguiendo de cerca el barranco y siempre con vistas hacia las Forquetas y los Bagüeñolas, en el macizo de Posets

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Poco después el camino cruza el barranco; aquí aprovecho para hacer una parada de avituallamiento, al estar más protegido

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El rincón también es idílico, con su puentecito y todo...

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Continúo bajando, ahora ya entre el bosque; tras los primeros campos aparece la cabaña de Sallena, en ruinas. Detrás se ve la pista a la que irá a desembocar el GR, pasando por las Collás

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Hacia atrás, el collado de Urdizeto queda oculto; desde allí baja el barranco de Sallena, hacia la derecha, con el de Montarruegos en medio

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A la altura de la cabaña de Sallena, el sendero se convierte en una pista que más tarde remonta unos pocos metros para alcanzar las Collás, un pequeño collado después del cual se cruza el PR HU-188, de Gistaín al Puerto de Plan. Ahí hay que bajar de golpe por un sendero poco visible entre los pastos. Enfrente, el Posets o Llardana se resiste a aparecer...

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...mientras que hacia el sur, el macizo del Cotiella vigila la salida de la Bal de Chistau, donde vierte sus aguas el Sallena

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El sendero y la pista se van cruzando, y en un cuarto de hora alcanzo la Cabaña de Lisier, refugio libre en buen estado. A partir de ahí sigo por pista en dirección al fondo del valle

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Finalmente llego a la pista que recorre la Bal de Chistau junto a la Zinqueta, en 3 horas y media desde el Collado de Urdizeto, contando paradas

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Este era uno de los sitios del Pirineo que tenía ganas de conocer... De momento me voy a hacer una pequeña idea, subiendo por la pista en dirección al ya cercano refugio de Biadós

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La verdad, un paisaje precioso; imagino que en fines de semana o en época estival, estos prados deben estar a rebosar, pero ahora en un jueves de septiembre, los tengo para mí solito... Poco me falta para ponerme a pastar

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Pero también noto el tute que llevo encima después de 9 horas; al dejar atrás la ermita de la Virgen Blanca y el Camping Forcallo el GR se desvía por la última rampa, estratégicamente situada para acabar de rematarme

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Subo los últimos metros casi arrastrándome hasta volver a encontrar la pista, junto a una pequeña explanada que sirve de aparcamiento del refugio. Al menos, las vistas sobre el valle y el pico del Montó, detrás del cual baja el barranco de Sallena, compensan sobradamente el esfuerzo

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Aquí la pista queda cortada al tráfico; lo más cómodo es seguirla unos 200 m. hasta encontrar el desvío que sube al refugio, pero entonces yo no sabía eso... y todavía tengo que superar un pequeño resalte por el GR, unos pocos metros que me hacen sacar la lengua, el hígado, los pulmones y demás entrañas, jurando en varios idiomas. Pero en tres minutos alcanzo un rellano tras el cual aparece el tejado en punta de una de las antiguas bordas de pastores, actualmente transformada en el Refugio de Biadós (1.732 m.)

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La verdad, después de un día entero atravesando valles, collados, ríos o montes, más que una buena ducha, una buena cama, una buena cena o una buena cerveza, lo que más se agradece es un atardecer como éste en un paisaje como éste: las Bordas de Biadós en el valle de Añes Cruzes, a los pies del Posets. Mañana seguiré por ahí



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